miércoles, 15 de febrero de 2012

EL CALCULO DE LA CIFRA DE DEFICIT PUBLICO

Cuando después del primer Consejo de Ministros del actual Gobierno, en vísperas de Navidad, salieron en rueda de prensa la Ministra Portavoz, el Ministro de Hacienda, el Ministro de Economía y la Ministra de Trabajo, teatralizando su preocupación porque acababan de saber que el déficit publico era del 8%, en lugar del oficial 6% que había vaticinado el Gobierno anterior, y nos anunciaron la subida de impuestos temporal, ya comencé a pensar que los datos no encajaban. Es preciso recordar que en aquel momento los Secretarios de Estado de Hacienda y de Presupuestos del nuevo Gobierno estaban sin nombrar, que el Interventor General del Estado, titular del órgano que tiene a su cargo las Cuentas publicas del Estado, era el del Gobierno anterior, que no había presupuestos aprobados para el año actual y los de 2011 no se cierran hasta el día 31 de marzo de 2012. Todos esos datos me hacían muy difícil digerir que el recién nombrado gobierno, que no llevaba ni una semana en sus puestos, hubiera sido capaz de cuantificar el déficit exacto en semejantes circunstancias. ¿ Alguien se imagina al propio Ministro haciendo los cálculos personalmente, puesto que no tenia otros altos cargos en el Ministerio que los del Gobierno anterior, sobre cuál era la cifra correcta de déficit? ¿O es que los altos cargos socialistas daban a Dña. Elena Salgado unas cifras y tres días después a Montoro le daban otras? ¿ O pasa con el déficit como con los principios morales, que si no le gustan los que expongo, tengo otros? En aquel momento pensé que el dato correcto sería del 8 o del 18, pero que era imposible que el nuevo gobierno lo hubiera podido calcular en semejantes circunstancias. Se argumentó que los desfases provenían de las CCAA, todas prácticamente, por cierto, en manos populares. Y tampoco me imagino al Ministro consolidando las cuentas autonómicas y del Estado personalmente. Ahora la agencia REUTERS se hace eco de las sospechas de que le cifra se infló, para poder luego presentar unos datos de cumplimento más optimistas ante la opinión pública y ante las autoridades europeas. El Gobierno lo desmiente. Y hay quien me ha insinuado que las nuevos cálculos se los ofreció el Interventor General de la etapa socialista, para demostrar que era un técnico y tratando de evitar su cese. Solo se que fue la excusa para meternos a los de siempre la mano en la cartera y, si mintieron, ya es tarde para que dimitan. Y si el Interventor General dio primero unas cifras y luego otras, ya esta haciéndose tarde para que le exijan las responsabilidades debidas, por falseamiento de las cuentas. Pero alguien tiene que ser responsable de tanto dislate.

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